martes, 3 de mayo de 2011

MARIA TERESA

MARÍA TERESA
Porque será que todas las personas que tenemos los ojos azules somos más tontas y repugnantes, que las demás.
Esta vez no soy un tio, si no una maldita puta, y golfa de mierda.
Os voy a contar como soy, para que veáis que no solo los hombres sois gilipollas, si no que las mujeres tenemos bastante culpa de ello.
Tengo el cabello largo y negro, como mi corazón, labios de chupa-pollas, y de gorda he pasado estar como un puto palillo, no podía ser menos que mis amigas. Porque si no, no causaba sensación. Físicamente ya no soy nada más que eso, otra putilla más.
La personalidad es mucho peor, me creo más de lo que soy, todo para suplir las carencias que tengo que son muchas. No suelo caer bien a nadie, porque me pienso la miss universo de mi grupo, pero para eso, tengo que volver a nacer. La simpatía la tengo metida en el chocho, con eso os digo todo. Mi culo solo sirve para echar la mierda que tengo dentro, pero que luego vuelve a salir al exterior, soy incurable. En las fiestas tengo que gritar y dame a conocer como una puta verdulera, ya que si no nadie me toma en serio, soy como los dueños de las tómbolas de las ferias, que tengo que destacar por encima de todas. Y a que mis amigas destacan por lo que son, sin más narices, pero yo me lo tengo que trabajar, porque ya me conocen, y no valgo nada.
Pero lo que más soy, es envidiosa.
Os cuento, una de mis amigas, estuvo con un chico de la peña, muy majo y simpático, tuvieron una pequeña relación, que yo no pude soportar, por lo que un día en el pueblo del chico este que nos invito, nos besamos, y luego lo proclame por ahí como si de un premio se tratara, pero luego ví que todo había sido por envidia cochina. Todo por no ser menos que una persona que siempre será más que yo. Aunque lo mío creo que el chico lo hizo por pena, porque la que más vale, es mi amiga, siempre va a esta por encima de mi.
Dentro del grupo de mis amigas, hay varias que no me soportan, es totalmente lógico, y es normal que se alejen de mi, además se nota que las quieren más que a mi. Yo creo que solo tengo una amiga fiel, que es más o menos como yo, pero más discreta. Hay otras chicas que también viene conmigo, pero pienso que deberían alejarse de mi, por que algún día las voy a meter en un lío, aunque imagino que dentro de poco se darán cuenta de quien soy, y sobretodo como soy. Aunque espero que no porque entonces me quedare sola, muy sola.
Cuando estoy en la cama, me pongo a pensar en como soy una mujer tan despreciable, como puedo vivir siendo a si, como mi madre me echo al mundo, como puedo........

ANTONINO

ANTONINO
Me llamo Antonino, y soy uno de los personajíllos , porque no se me puede llamar hombre, más tontos que existen en el mundo.
Fijaros si soy gilipollas, que con tres copicas de vino blanco, me emborracho, y me empiezo a acordar de las cosas que me han pasado, o de lo que he leído, aunque leer se bastante poco.
Me voy a describir, por si alguien me ve por la calle y quiere darme unas hondonadas de hostias, porque como no puedo cambiar de cerebro, por lo menos a ver si me lo colocan en su sitio.
Soy alto, delgado,  tanto que parezco un puto palillo que acaba de salir de la boca de un viejo, cara de gilipollas, como cuando hacen fotos y las trucan estirándolas, pues igual.
Ojos azules, no puedo destacar nada más de mi físico, porque no soy nada más que eso. Bueno, se me olvidaba, tengo unas orejas, enormes, claro han de cubrirme la parte lateral de la cara, como un elefante, pero las del elefante son mucho más bonitas.
Mi vida, como toda la de los tontos como yo, a estado llena de simplezas, y de estupideces, como no, llevadas a cabo por mi. Pero no os voy describir ninguna porque soy tan subnormal que casi no me acuerdo.
Os voy a contar lo que paso en el cumpleaños de unas amigas de mi novia, es que los idiotas como yo siempre tenemos suerte y siempre nos quieren, esa es la putada de la vida.
Era un sabado por la noche, ya estábamos sentados, pero faltaba gente por venir, empezaron a servir la cena que las del cumpleaños habían preparado, a si que nos pusimos a cenar. Yo soltaba mis gracias, que son gracias por los cojones, pero las suelto. Antes que se me olvide, os cuento de quien estoy rodeado. De un puto vasco de los cojones que ya veras lo que respondió más tarde, y del marido de una amiga de mi novía, que era el único majo de los tenía a mi alrededor, por supuesto mucho más que yo, claro esta. Todo pasaba, y entonces se abrió la puerta, y entro David, un amigo de las amigas de mi novia, saludo y se sentó, yo también le salude, pero soltándole una de mis gracias, la cual, en su rostro reflejo algo de antipatía por mi, lo veo normal, recordad que soy especialmente tonto. Todo transcurría tranquilo, y hoy una frase de este tal David, que decía, yo es que odio a casi todo el mundo, y yo toño el idiota, le respondí, todo serio.
-Pero a mi no me odias, verdad, porque si no para que.
David se me quedo mirando como sin pensar en que decir, y si había oído o que había oído, yo de pronto sonreí, y el dijo.
-Por ahora no.
Todo siguió igual, yo mis gracias habituales, que si sigo haciéndolas algún día me romperán la cara a trozos, y lo único que quedara de ella será una desfiguración total. Yo comencé a pedirme copicas de vino blanco. Como de una onza aproximadamente, ancha por arriba y estrecha y con el pie muy junto a la base. Entonces, el vasco de la mierda, dijo algo en su dialecto, y entonces David, le dijo, en castellano por favor, y el puto vasco se volvió, y le dijo.
-Yo hablare como de la gana, a si que no me toques los cojones- dijo el pedazo de subnormal.
Yo no pensé en nada, porque soy demasiado cobarde para haberle dicho lo que dijo David. Pero el chico que pensaría, no hace falta que diga nada, el idota de vasco ya se descalifico lo suficiente, hasta que se encuentre con alguien que le parta la cara, y le mande a su tierra de etarras gilipollas como él.
Todo transcurría bien, menos para mi que empezaba a subrime las copas de vino blanco que tomaba. Hasta que llego la hora de marcharnos, y entonces recordé un párrafo que David había escrito a mi novia en el muro, era algo a si como que yo no era bueno para ella, entonces comencé a chillarle, y a decirle cosas que no venían a cuento, David, me escuchaba, algo de mucha educación, la cual yo no tuve ni tendré, lo que me di cuenta que mi novia, me decía que a si no, que no siguiera, pero como soy tan subnormal y no se cuidar de  las mujeres, pues seguí, pero todo lo que empieza acaba, así que se acabo y cada uno se fue por su lado. A si que, eso fue lo que paso. Que pensaría ese chaval de mi, pues lo que pensó todo el mundo, que soy uno de los tíos más tontos del mundo.
Eso fue todo lo que paso, por lo que, yo al ser tonto como ninguno, no tengo remordimientos, ni nada parecido, fijaté lo cobarde que soy, que ni siquiera he tenido la decencia de llamar a David y pedirle perdón.
Me miro al espejo, y me pregunto; ¿como puede haber gente tan tonta como yo en este puto mundo. ¿Como puedo llegar existir, siendo tan tonto?, pero la pregunta que más miedo meda, o más bien lo que pueda llegar a pasar algún día.
¿Si eso lo hice con un tió que me importa una puta mierda, que le podría hacer a mi novia en un momento dado?
¿Mis padres saben que tienen un hijo tan subnormal?
Que pena que haya gente que vale tanto, sea tan buena persona, y estén solos, y yo que soy una puta basura, tenga alguien a mi lado.